"Lucía y el Conde", para contrabajo solista y cuarteto de cuerdas, fue encargado por el "Apple Hill Chamber Players" en 1981. Tomando la leyenda de Drácula como punto de partida, el contrabajo encarna el personaje del Conde Drácula, y los miembros del cuarteto interpretan unos invitados que tiene una conversación en una cena. En la segunda de las tres escenas, los propios instrumentos de hecho establecen una conversación, sílaba por sílaba, con una técnica llamada de "hablar-tocando" (speak-playing). El violín I representa la romántica heroína, Lucy, el violín II, a su ineficaz novio, Jonathan, el violista es el doctor Van Helsing -el cazador de vampiros, y el violoncelista es el doctor Seward.
De hecho, toda la pieza está, intencionalmente, impregnada de sonidos gráficos, que incluyen la respiración pesada, un barco crujiendo en el viento, jadeos, ataúdes y ventanas que se abren , etc.
El contrabajista narra, entre las escenas, para dar una idea más clara de la acción.
Caracas, 18 al 27 de mayo de 2012